Hirving Lozano se encuentra en un momento decisivo de su carrera, uno que muchos futbolistas enfrentan: el de la despedida. El mexicano vivió lo que podrían haber sido sus últimos minutos con el PSV Eindhoven en la UEFA Champions League, un torneo que ha sido un escaparate fundamental para sus habilidades y su potencial en el extranjero.
Este martes, el PSV Eindhoven visitó tierras francesas para enfrentar al Stade Brestois en la última jornada de la fase de grupos. Sin embargo, Lozano no fue incluido en el once inicial del equipo, lo que dejó a muchos aficionados preguntándose si esta sería la última vez que lo verían en el prestigioso escenario europeo. Cuando finalmente saltó al campo en el minuto 73, el equipo ya se encontraba en desventaja, perdiendo 1-0. Esa escena fue una mezcla de emoción y tristeza, simbolizando el cierre de un capítulo en su carrera, ya que a partir de enero de 2026 se unirá al San Diego FC, una nueva incorporación a la Major League Soccer (MLS).
La derrota del PSV en este encuentro no solo marca un final significativo para Lozano, sino que también representa un tropiezo considerable para el equipo neerlandés en su búsqueda de la gloria en la Champions. Con solo ocho puntos y ubicados en el puesto 23 de la tabla, la situación es complicada. A pesar de que aún tienen una posibilidad de avanzar a los Dieciseisavos de Final si logran vencer al Sparta Praga, el destino del PSV parece incierto y lleno de desafíos. Es un momento tenso, no solo para el equipo, sino para los seguidores que han estado con ellos en cada paso del camino.
Por otro lado, el Stade Brestois ha logrado destacar en este nuevo formato de la Champions, posicionándose en el tercer lugar con 13 puntos. Esta sorpresa ha añadido una capa más de dramatismo a la narrativa de la competencia, dejando a los fanáticos de su equipo celebrando un desempeño notable.
A medida que miramos hacia el futuro, la partida de Lozano a la MLS representa una nueva aventura y un regreso a un entorno diferente, donde buscará dejar su huella. Sin embargo, para muchos de sus seguidores y aquellos que lo han visto crecer en el fútbol europeo, su partida marca el final de una era, una época caracterizada por sueños alcanzados y metas que fueron superadas, a la vez que se deja atrás un escenario que lo catapultó al estrellato mundial. Llevará consigo no solo los recuerdos de partidos y logros, sino también la experiencia inigualable que vivió en el fútbol europeo.
